Hey Juan,
Yo lo que suelo hacer es cambiar una cuerda cada vez para mantener la estabilidad de la guitarra y no tener que ajustar el Alma, a no ser que vaya a hacer una limpieza del diapasón, en cuyo caso quito todas las cuerdas, limpio bien el mástil, el diapasón y el cuerpo de la guitarra y cambio las cuerdas. Si quitas todas las cuerdas es importante revisar el quintado una vez hayas puesto las nuevas.
Si la guitarra ha estado en otra habitación o vengo de la calle, la dejo en el estuche unos minutos antes de sacarla para que se adapte a la temperatura de la habitación en la que estoy y luego comienzo con el cambio de cuerdas. Una vez cambiadas, afino a pitch y toco unos acordes con cierta intensidad, hago bends en todas las cuerdas y vuelvo a afinar. por último las estiro un poco y afinación final...
El problema de estabilidad en la afinación es más un problema de set-up de la guitarra que de "como las cambias". Unos buenos locking-tuners, un buen puente (sobretodo si es flotante) y su seteo es muy importante para la estabilidad.
En guitarras con Locking-Tuners, es importante no dejar cuerda sobrante en el afinador. Giro los afinadores para que el agujero esté en dirección por donde va a entrar la cuerda (agujeros mirando al mástil), la inserto y la estiro al máximo. Mientras está bien estirada cierro el bloqueo del afinador. Una vez cerrado, hago un pequeño ángulo (menor de 90º) en la cuerda y la corto lo más cercana al afinador.
Si la guitarra no tiene locking-tuners pero sí puente flotante suelo poner las cuerdas "al revés", es decir con la bola en los afinadores en vez de cortarla para encajarla en el puente flotante. Luego, con el agujero del afinador en dirección al mástil estiro la cuerda y la corto unos centímetros pasado el agujero de la setilla donde se inserta la cuerda en el puente. Cuidado no te quedes corto al cortar la cuerda...
Ese pequeño truco junto con la Locking-nut hace maravillas para la estabilidad.
Si la guitarra no tiene ni Locking-Tuners ni es de puente flotante, uso la misma técnica que el vídeo que ha posteado
@GibsonLesPaul
En todos los casos, una vez cambiadas y afinadas las cuerdas, las estiro desde la mitad del mástil más o menos una a una y vuelvo a afinar hasta que con el último estirón no cambia la afinación. Nunca estires muy fuerte, con un leve estirón cada vez es suficiente.
Aún con todo, el mayor problema de la estabilidad en la afinación es la temperatura. Ahora en Otoño/Invierno es normal que la guitarra pase de temperaturas muy frías a cálidas en muy poco tiempo (de casa al coche, del coche al local de ensayo, etc...) lo que provoca que el mástil se curve por el cambio de temperatura y debas afinarla al llegar al destino. En esos casos, al pasar de una temperatura fría a cálida (o viceversa) es imprescindible dejar a la guitarra unos minutos en un stand para que se adapte a la temperatura de la sala antes de afinar, sino afinarás y mientras tocas, el mástil se irá adaptando a la temperatura y tendrás problemas de afinación.
Estoy seguro que la mayoría de lo que cuento ya lo sabes, pero en realidad no hay mucho misterio en el cambio de cuerdas.
Un saludo!